¿PODEMOS EVITAR EL DETERIORO MENTAL?

Es obvio que envejecemos, que nuestra capacidad de regeneración ni es tan amplia ni tan intensa como en los años jóvenes, que durante el paso del tiempo se van marcando las huellas del deterioro, que las cicatrices y las arrugas revelan un pasado menos saludable de lo deseado, donde los desequilibrios hormonales han hecho de las suyas, limitando muchas de las funciones biológicas, que nos permitieron una recuperación casi completa hasta los 20 – 30 años.

Hay autores que defienden la existencia en todos los seres vivos de una especie de “reserva cognitiva”, acumulada durante los años de mayor crecimiento y desarrollo neuronal, que puede ayudar a mantenernos en mejores condiciones y durante más años, cuando los procesos degenerativos no nos faciliten tanto la recuperación.

Parece ser que su funcionamiento sería similar a la reconocida “reserva física” que garantiza un mejor funcionamiento cardiovascular y osteomuscular. En realidad, si las redes neuronales con sus sinapsis están fortalecidas por un continuado entrenamiento, es lógico esperar que su deterioro sea mucho más ligero, cuando la capacidad regenerativa disminuya.  

Si realizamos ejercicios físicos aeróbicos, además de los beneficios directos en los órganos estimulados, también aumentamos el número de neuronas del “hipocampo”, cuya estructura garantiza los procesos del aprendizaje y de la memoria.

Estos beneficios se explican porque la estimulación física aeróbica favorece el incremento de los factores de crecimiento a nivel general y por lo tanto mejora la proliferación de los vasos sanguíneos, que riegan el cerebro con mayor profusión de nutrientes y menor riesgo de desarrollar procesos de “arteriosclerosis”.

Las razones últimas de estos resultados hay que encontrarlas en el propio diseño genético del ser humano, que está preparado para llevar una vida realmente activa y no tan sedentaria como la nuestra, puesto que de los 1.400 gramos del cerebro del hombre actual, al menos en 400 gramos compartimos las mismas estructuras que nuestros parientes los chimpancés, que están destinadas a mover toda la musculatura disponible para poder saltar, correr, trepar, jugar, huir, luchar, etc. Sigue...

Continuar leyendo
0 Comentarios

ESTILOS DE VIDA SALUDABLE

Los estilos de vida que adoptamos influyen directamente en nuestro Bienestar, porque forman parte de los Pilares de la Salud. El estado de bienestar o de Salud es un proceso dinámico e inestable, dependiente de la conjunción e interacción equilibrada de los cuatro pilares básicos, sobre los que se apoya: La Alimentación, la Actividad, el Descanso y la Motivación.

La Alimentación (Ver) debe garantizar la energía requerida por el organismo humano a partir de los nutrientes esenciales, en cantidades y proporciones idóneas, para crecer y renovarse, durante las diferentes etapas de la vida. El ser humano es un animal omnívoro necesitado de macronutrientes Diccionario* y micronutrientes Diccionario* en la cantidad, frecuencia y proporción ajustadas para desarrollar su vida con plenitud. De ahí la necesidad de planificar las comidas y aprender a confeccionarlas adecuadamente.

La Actividad entendida como estimulación física y psíquica es imprescindible para que un organismo vivo pueda favorecer su desarrollo, mantenimiento, renovación y rehabilitación funcional. Los desplazamientos para buscar y acarrear la comida serán sustituidos por paseos, footing y carreras de todo tipo. Los esfuerzos y las estrategias mentales para localizar, acechar y conseguir finalmente las piezas de caza y pesca, deberán ser sustituidos por otras habilidades como solventar algún problema de trabajo, dominar un nuevo idioma o hacer música, arte, etc. En realidad es nuestra necesidad el permanecer siempre activos física y mentalmente, si no queremos perder facultades. 

El Descanso (Ver) del ser vivo es un elemento indispensable para compensar y recuperar el equilibrio óptimo inicial, para el normal desenvolvimiento y estabilización de todas las fuerzas antagónicas, que intervienen en el proceso de la vida. Es fácil comprender que popularmente se le reconozca y se le atribuya al sueño, su autentico papel de elemento reparador. Es conveniente dormir unas 8 horas diarias y entre 10 a 45 minutos de siesta, siendo conscientes de que sin el suficiente descanso es imposible la recuperación tanto física como psíquica y esto nos obliga a administrar nuestros tiempos de tregua con el mayor esmero y eficiencia*. 

La Motivación (Ver) o apoyo mental es la fuerza natural de los seres evolucionados, que se hace necesaria para lograr el Bienestar. Esta herramienta adquiere una importancia vital en los tiempos actuales y podemos considerarla como un elemento básico, que aúna el Instinto y la Razón necesarios para la Supervivencia. El apoyo mental, motivación o mentalización se interpreta como una decisión firme e inquebrantable del propio individuo, que le anima de forma constante e incondicional a superar las circunstancias adversas, que limitan su supervivencia o impiden la adaptación y la superación de las condiciones cambiantes del entorno.

Cuando una persona no está motivada para vivir, no puede sacar fuerzas para soportar los inconvenientes que la propia vida le acarrea y se coloca en las condiciones perfectas para escribir la última etapa de su historia personal. La perdida de la autoestima y el no encontrar razones por las que merezca la pena vivir son el preámbulo de las situaciones depresivas, que nos conducen al deterioro cognitivo y con él a la autodestrucción global.

El ser humano es un ser social, que debe estar en activo todos los días de su vida, colaborando con todas las energías posibles en el mejoramiento de su propia personalidad y en el de su comunidad familiar-social, por ello sería deseable que nadie pasara sus días vegetando sin ninguna misión que realizar, ni aislado en ningún gueto, por muy cómodo que pudiera llegar a ser.

La persona mayor debería estar a disposición de la sociedad en la que se ha desenvuelto y sin contrapartidas, sin esperar nada a cambio y con un sentido de agradecimiento al entorno comunitario, porque le ha permitido hasta ese momento el nacer, crecer y vivir. Sería deseable tratar de compartir y devolver a la sociedad, es decir, a sus legítimos dueños todo lo que se haya podido aprender durante el periplo vivido y es seguro que todas las personas precisamos para mantener nuestra autoestima que la sociedad más próxima cuente con nosotros, que nos valore y respete, de lo contrario se va imponiendo progresivamente el tan temido “apagón emocional”, que acaba con las ilusiones de los seres más experimentados, víctimas de su deterioro físico y mental por ausencia o insuficiencia de unos adecuados estímulos que aseguren el mantenimiento de su actividad.

Continuar leyendo
0 Comentarios

FRENTE A LA ATROFIA, ACTIVIDAD

La influencia de los estímulos en el desarrollo de las funciones y capacidades de los organismos vivos es una constatación universal y nuestro sistema orgánico no es una excepción a esta regla. Distinguimos entre actividad física y psíquica, no porque usen mecanismos diferentes, ni afecten a sistemas antagónicos, sino para profundizar mejor en cada una de ellas.

El ejercicio físico moderado, desarrollado al aire libre es ideal para mantener en perfectas condiciones de salud a todo el organismo. Sabemos que la actividad física aumenta la entrada de oxígeno a los pulmones, mejora la oxidación / combustión de la glucosa en las mitocondrias y aporta la energía necesaria para la regeneración de las células. 

El ejercicio físico provoca efectos beneficiosos en los sistemas osteomuscular, cardiovascular, respiratorio y metabólico, a los que debemos añadir las no menos importantes consecuencias favorables en el ámbito de la salud mental, como es el aumento de la capacidad reparadora de las neuronas tras accidentes o enfermedades neurodegenerativas como el Parkinson y otras enfermedades mentales como la ansiedad (Ver), la depresión (Ver) y el estrés crónico.

La sabiduría popular ha consolidado afirmaciones como: “el órgano que no se activa se atrofia”, “el que no llora no mama”, “el que no recoge desparrama”, “el que no construye destruye”, “la función crea el órgano”,  “la inactividad mata”, “al que no come se lo comen”, “al que no se organiza lo organizan”, “el que no lucha sucumbe”, etc.

Es obvio que la actividad es consubstancial con la vida, que el equilibrio nunca es estático sino dinámico, que el que no se renueva se muere, porque la degradación biológica es implacable y la regeneración depende de los estímulos recibidos. Sigue...

Continuar leyendo
0 Comentarios

BENEFICIOS DE LA ACTIVIDAD

El ejercicio físico es beneficioso a cualquier edad, desde el inicio la respuesta para la salud es positiva y depende del tiempo e intensidad empleados, dentro de unos límites racionales.

Desde un punto de vista científico, no hay duda de que con la actividad física adecuada podemos frenar el deterioro orgánico, que habitualmente y de forma generalizada e inexacta asociamos con el paso de los años.

También se sabe que el ejercicio físico es beneficioso para el sistema osteomuscular, para el cardiovascular y para el respiratorio, pero también para las funciones cognitivas y mentales del cerebro. Las razones de estos hallazgos se basan en que el ejercicio físico contribuye a la síntesis y liberación de los neurotransmisores, activa la formación de sinapsis nerviosas e incrementa la capacidad regenerativa del cerebro.

Estudios paralelos demuestran que una actividad física bien diseñada es capaz de mejorar los estados de ansiedad, depresión y potenciar las capacidades psicológicas, que el organismo precisa para superar las situaciones de estrés crónico.

Otro beneficio a tener en cuenta es que las personas que han realizado actividades físicas durante los años de la infancia, adolescencia y juventud, han adquirido una especie de “reserva natural” que les sirve a lo largo de toda la vida, como si sus efectos fueran acumulativos. Sigue...

Continuar leyendo
0 Comentarios

¿AERÓBICOS O ANAERÓBICOS?

Aunque todo ejercicio se inicia con una etapa anaeróbica, conviene señalar las diferencias entre ambos tipos de ejercicio: El ejercicio aeróbico necesita de la respiración, que nos aporta el oxígeno preciso para quemar el combustible (grasa o hidratos de carbono), suele ser el tipo de ejercicio más habitual, de intensidad variable (andar, correr, nadar, ir en bici, etc.), sirve para quemar grasas y mejora los sistemas cardiovascular y osteomuscular.  

El ejercicio anaeróbico no necesita tanto oxígeno porque utiliza directamente energía, que no precisa tanto oxígeno, como el ATP muscular, la fosfocreatina y la glucosa. Son ejercicios de duración corta o de alta intensidad (levantar pesas, sprint, carreras de velocidad, etc.), que desarrollan gran esfuerzo en poco tiempo. Estos ejercicios son idóneos para tonificar y fortalecer el sistema musculoesquelético. 

Los mejores resultados en materia de salud se han obtenido con la combinación de los ejercicios físicos “anaeróbicos”, junto con los ejercicios “aeróbicos”, más habituales realizados al aire libre, que nos armonizan con el entorno, mejoran la circulación sanguínea, activan los factores de crecimiento, normalizan la tensión arterial, reducen los niveles del colesterol “malo”, (C-LDL), evitan los desequilibrios hormonales como la diabetes y neutralizan los riesgos de arteriosclerosis.

Tradicionalmente llamamos ejercicio físico a cualquier actividad que haga trabajar al cuerpo algo más de lo habitual, incorporando actividades que superen la rutina diaria de desplazarse, sentarse, pararse, tumbarse e incorporarse, aunque en realidad todos estos movimientos ponen en marcha alguno de los grupos musculares, cuya actividad comporta beneficios como:

-Mejora del estado físico y de la capacidad para llevar a cabo las actividades diarias.      

 -Prevención de enfermedades (osteoporosis, anquilosis, ansiedad y depresión)         

-Evitación de la diabetes (Ver), la hipertensión arterial (Ver), cardiopatías, etc.

-Control del peso (Ver) y de la obesidad (Ver)al reducir el exceso de grasa.  Sigue...

Continuar leyendo
0 Comentarios

¡Atención! Este sitio usa cookies y tecnologías similares.

Si no cambia la configuración de su navegador, usted acepta su uso.

Acepto
© 2019 Dyética escuela de salud. Todos los derechos reservados.