¿QUÉ ES LA ARTERIOSCLEROSIS?

La etimología de la palabra proviene de arterio, que significa en griego “arteria” y esclerosis “endurecimiento o cicatrización”.

Así llamamos Arteriosclerosis al endurecimiento de las arterias, que provoca también un estrechamiento de las mismas, pudiendo llegar a ocluir los vasos y paralizar el flujo sanguíneo normal. 

Se sabe que ciertas alteraciones del tejido conjuntivo, junto con otros factores de riesgo como la hipertensión arterial (Ver), el tabaquismo, la obesidad (Ver), la diabetes (Ver), el sedentarismo, el exceso de colesterol y triglicéridos, pueden en conjunto ser las causas más importantes para la aparición de la arteriosclerosis. 

La aterosclerosis es la forma más frecuente de inicio de la arteriosclerosis y se caracteriza por un engrosamiento de la capa interna de las arterias por la formación de “placas de ateroma”. Estas placas están compuestas inicialmente por macrófagos (glóbulos blancos), transformados en células espumosas, repletas de colesterol  y de otras grasas.

Los macrófagos recogerán mayor o menor cantidad de colesterol y lipoproteínas de baja densidad  (C–LDL), proporcionalmente al tiempo que tarda el hígado en preparar sus receptores para ese tipo de lipoproteínas.

La placa se hace más gruesa, se endurece por formarse en ella depósitos de calcio y la luz de la arteria se estrecha, se hace menos flexible y se dificulta el flujo sanguíneo, hasta acabar finalmente bloqueando el paso de la sangre por las arterias.

Toda obstrucción arterial es fuente de complicaciones, pero cuando afecta a las arterias coronarias, que alimentan al corazón, el flujo de sangre disminuye y puede llegar a detenerse, produciendo anginas de pecho e infartos del músculo cardiaco, acompañados de su dolor característico, dificultad para respirar y otras complicaciones. Sigue...

Continuar leyendo
0 Comentarios

¿QUÉ SON LAS ENF. VASCULARES?

Bajo el nombre genérico de Enf. Cardiovasculares subyacen dos mecanismos de acción básicos;  la Arteriosclerosis y la Trombosis, causantes directos del fracaso de los sistemas del riego vascular. 

Las enfermedades vasculares  son una de las dos principales causas de mortalidad en los países desarrollados, siendo en España las E. Cardiovasculares responsables del 32 % de los fallecimientos y el cáncer del 26 %.

Estas cifras, por sí solas, ya nos hablan de su importancia estratégica y de la necesidad de diseñar programas para su prevención, tratamiento y erradicación, si fuera posible.

Con demasiada frecuencia aceptamos que el factor edad condiciona de forma implacable la fortaleza y la resistencia del sistema cardiovascular, frente a las vicisitudes, que nos depara la vida y no nos damos cuenta de que nuestro propio organismo es capaz de desarrollar todos los mecanismos necesarios para su mantenimiento y recuperación, siempre que le suministremos los macro y micronutrientes y las condiciones necesarias para su rehabilitación.

Otro factor, que cada día se descubre como más esencial para nuestra salud es la “microbiota”, o el conjunto de seres microscópicos que viven en simbiosis dinámica con el ser humano, desde el nacimiento hasta el final de la vida. Sabemos que controlan nuestra inmunidad, intervienen en la defensa frente a varios tipos de cáncer y además nos protege de enfermedades como: obesidad, diabetes, colon irritable, esclerosis múltiple, Crohn, colitis ulcerosa, enfermedad inflamatoria intestinal, Parkinson, artritis reumatoide, Alzheimer y tambien de las enfermedades cardiovasculares.  Y lo más interesante y práctico para nuestros intereses de Salud es que podemos modularla con la misma “dieta equilibrada”, que nos proporciona el AUTOCUIDADO  a los humanos, puesto que se alimentan de lonuestros propios restos alimenticios. Sigue...

Continuar leyendo
0 Comentarios

EL AUTOCONTROL EN LA HTA

Sería ideal que cada persona detectara los factores que están condicionando sus cifras de tensión arterial y que ella misma las normalizara con solo cambiar los hábitos no saludables de su vida. Simplemente con aprender a comer con la fórmula ideal (Ver), a descansar adecuadamente y tener una vida activa pero sin estrés crónico, estaríamos resolviendo muchos problemas y la HTA dejaría de ser “la enfermedad silente” que nos amenaza en la sombra.  

Nuestro sistema metabólico está diseñado para autoequilibrarse constantemente, renovándose y adaptándose a cada circunstancia de la vida de una forma perfecta, siempre que las variaciones del medio ambiente no sean demasiado extremas y el organismo disponga de todos los suministros necesarios para el desarrollo de sus funciones de supervivencia.

Para prevenir la HTA no debemos conformarnos con tomas frecuentes de la tensión arterial, poniendo todo el énfasis en la detección precoz, sino tratar de prevenirla, reduciendo el sobrepeso y la obesidad, la falta de ejercicio físico, el déficit de descanso y el exceso de estrés, mayoritariamente el crónico, en nuestras vidas.

En los países desarrollados la posibilidad de poder contar con estas premisas es algo perfectamente asumible y asequible, puesto que tanto las condiciones ambientales que disfrutamos como la facilidad de acceso a los alimentos básicos está perfectamente garantizado en cuanto a la cantidad, calidad y diversidad.

Únicamente nos falta tomar conciencia de nuestras posibilidades reales, reencontrar el equilibrio hormonal y poner en marcha los procesos de autorregulación y regeneración, para conseguir el perfecto estado de bienestar físico, psíquico y social, la Salud (Ver).

Continuar leyendo
0 Comentarios

¿SE DEBE PROHIBIR LA SAL?

A la hora de valorar los factores ambientales se suele responsabilizar a la sal de mesa como elemento causante de HTA y en consecuencia tratamos de reducirla a la mínima expresión, sin pararnos a pensar que el consumo de sal no es un factor que ha aparecido en escena de forma repentina, sino una hábito ancestral y cotidiano en la vida de los mismos pacientes que anteriormente presentaban cifras normales. Es cierto que si reducimos la sal se reduce también la cantidad de agua que acumulamos y en consecuencia el líquido circulante por las arterias con el lógico descenso de la presión arterial.

Esta solución de reducir la sal de mesa no ataca el problema en su origen y tiene una eficacia muy escasa y hasta cuestionable. Con frecuencia los pacientes hipertensos a los que se les restringe la sal, también deben medicarse diariamente si quieren controlar sus cifras de tensión arterial, con lo que añadimos a los inconvenientes de la restricción salina los efectos secundarios de los medicamentos y una dependencia farmacológica de “por vida”.

Únicamente está justificada la restricción de la sal, cuando la función renal de los pacientes está alterada y en consecuencia tienen problemas para su eliminación a través de la orina, siendo esta acumulación salina y su correspondiente retención hídrica la causa directa de una elevación patológica de su tensión arterial.

Esta capacidad del organismo para funcionar con mayor o menor cantidad de agua y su influencia directa en la tensión arterial se puede y debe utilizarse para solventar los problemas esporádicos de hipotensión arterial, que responden muy bien simplemente al incremento en la ingesta de líquidos. Sigue...

Continuar leyendo
0 Comentarios

LA HTA Y EL FACTOR EDAD

Hemos comentado otra falacia muy extendida: “la HTA aumenta por la edad” y esto es absolutamente falso, derivado de una visión poco rigurosa de la realidad. En el análisis de los estudios de poblaciones sí se aprecia que las cifras de hipertensos son más altas en los grupos de mayor edad hasta los 70 años y luego van disminuyendo hasta los más ancianos.

Ante estas cifras debemos aprender a interpretar que el factor edad no es el causante de la HTA, sino que en esos grupos de edad hay mayor numero de hipertensos, porque entre ellos hay más obesos, más personas estresadas y más enfermos en general. Conforme avanzamos en los grupos de edad (mayores de 70 años), constatamos que han ido muriendo los más afectados por esos problemas de salud y van quedando los más sanos, y eso propicia ese marcado descenso en el nº de hipertensos. 

Si analizáramos otros parámetros como la capacidad económica o cultural, en relación a la edad nos aparecerían unas gráficas muy parecidas y no se nos ocurriría pensar que los abuelos, solamente por el factor edad, deberían tener necesariamente más capacidades económicas y mentales que los más jóvenes. Las capacidades no se incrementan directamente por la edad (Ver) sino por otros factores como el esfuerzo y el trabajo, cuyos efectos se visualizan con el paso del tiempo.

En la presentación de muchos de los estudios epidemiológicos o no se estudiaba a las personas mayores o se representaban en un solo grupo a los mayores de 60 años y así no era fácil detectar el error. Cuando se realiza una observación más meticulosa, el factor edad pierde fuerza y son otros factores como el sobrepeso y el estrés, actuando a lo largo de los años, los que explican los incrementos de la tensión arterial.

Si tomamos la tensión arterial a personas que llevan una vida saludable, que comen y beben correctamente, duermen como niños, están moderadamente activos y no padecen de estrés, observamos que mantienen sus cifras de tensión arterial en la normalidad a lo largo de toda su vida. Sigue...

Continuar leyendo
0 Comentarios

¡Atención! Este sitio usa cookies y tecnologías similares.

Si no cambia la configuración de su navegador, usted acepta su uso.

Acepto
© 2019 Dyética escuela de salud. Todos los derechos reservados.