La falta de sueño comporta problemas de salud para los adolescentes obesos

Robert Preidt

JUEVES, 6 de marzo de 2014 (HealthDay News) -- Los adolescentes obesos que
duermen demasiado poco tienen un riesgo más alto de sufrir enfermedades
cardiacas y diabetes, sugiere un pequeño estudio.

Los investigadores evaluaron los niveles de salud y de actividad y los hábitos
de sueño de 37 jóvenes obesos estadounidenses, de 11 a 17 años de edad.
Entre los participantes del estudio, solo un tercio cumplía con las
recomendaciones mínimas de ser activo físicamente al menos durante una hora al
día. La mayoría dormían unas siete horas por noche, y normalmente se despertaban
al menos una vez. Solo cinco de ellos llegaban al mínimo recomendado de 8.5
horas de sueño por noche.
Dormir demasiado poco se asoció con un aumento del riesgo de enfermedades
cardiacas y diabetes, con independencia de otros factores de riesgo, como la
falta de actividad física y los niveles altos de grasa corporal, según los
investigadores del Sistema de Salud de la Universidad de Michigan y la
Universidad de Baylor.
Los hallazgos, publicados el 6 de marzo en la revista The Journal of Pediatrics,
sugieren que las evaluaciones del sueño podrían ser útiles para detectar a los
niños en riesgo de enfermedades cardiacas y diabetes.
Se necesitan más estudios para averiguar si dormir más ayudaría a reducir el
riesgo de los adolescentes de estos problemas de salud, afirmaron en un
comunicado de prensa la autora principal del estudio, Heidi IglayReger,
supervisora del Laboratorio de Actividad Física del Centro de Metabolómica y
Obesidad de Michigan, y colaboradores.
La investigación previa ha mostrado que la obesidad y la falta de sueño están
vinculadas con un riesgo más alto de enfermedades cardiacas y diabetes en las
personas adultas y en los niños pequeños, pero esa asociación no se ha aclarado
en los adolescentes, indicaron los autores del estudio.
Aunque el estudio mostró una asociación entre la falta de sueño y un riesgo
mayor de enfermedades cardiacas y diabetes en los adolescentes, no probó
causalidad.

Artículo por HealthDay, traducido por Hispanicare
FUENTE: University of Michigan Health System, news release, March 6, 2014
HealthDay