Más evidencias de que el ejercicio podría ayudar a combatir la depresión

JUEVES, 16 de octubre de 2014 (HealthDay News) -- Las personas físicamente
activas tienen menos probabilidades de mostrar señales de depresión, halla un
estudio reciente.

Y el ejercicio puede ayudar a mejorar el estado de ánimo en las personas que ya
se sienten deprimidas, aunque hay una salvedad. Los síntomas de depresión
parecen ser una barrera contra la actividad física, comentaron los
investigadores británicos.
Los hallazgos, basados en 11,000 adultos de 23 a 50 años, se correlacionan con
investigaciones anteriores que sugieren que el ejercicio puede tener un efecto
potente sobre la depresión, aunque dista mucho de ser una panacea.
"El ejercicio es bueno para uno", aseguró el Dr. Madhukar Trivedi, un
investigador destacado en el campo de los efectos de la actividad física, que no
participó en el estudio. "Mejora la salud mental y reduce las probabilidades de
contraer depresión".
Quizá parezca obvio que el ejercicio mejora el ánimo, pero probarlo de forma
científica ha resultado difícil. Uno de los problemas es que las personas
deprimidas tienden a retraerse y no quieren participar en ningún tipo de
actividad. Si hacen ejercicio, podría ser porque su depresión comienza a
desaparecer por algún motivo que no tiene nada que ver con su nivel de
actividad, señalan los expertos.
La nueva investigación, publicada en la edición en línea del 15 de octubre de la
revista JAMA Psychiatry, utilizó los datos de un estudio de gran tamaño de
personas nacidas en una sola semana en marzo de 1958, en Gran Bretaña.
Los investigadores, del Colegio Universitario de Londres y la Universidad de
McGill, en Canadá, evaluaron los síntomas comunes de la depresión, entre ellos
los problemas para dormir, la fatiga, la irritabilidad y la ansiedad a los 23,
33, 42 y 50 años de edad.
El diseño del estudio utilizó unas complejas fórmulas estadísticas, y halló que
las personas que hacen más ejercicio tienen menos síntomas de depresión. Y las
personas más jóvenes que hacían más ejercicio tenían menos síntomas de depresión
a lo largo del tiempo.
Entre las personas inactivas de todas las edades, aumentar la actividad de nunca
a tres veces por semana redujo las probabilidades de depresión en un 19 por
ciento cinco años después, hallaron los investigadores.
Por otro lado, los que eran inactivos a los 23 años y seguían siendo inactivos
cinco años más tarde no mostraron ningún cambio en el número de síntomas de
depresión, señalaron los investigadores.
Esas tendencias se sostuvieron incluso cuando los investigadores ajustaron sus
estadísticas por factores como el nivel educativo.
El estudio no puede probar que el ejercicio sane la depresión. Pero "añade mucha
más confianza a lo que sabemos", dijo Trivedi, director del Centro Integral de
la Depresión del Centro Médico Southwestern de la Universidad de Texas, en
Dallas.
"Las personas que hacen ejercicio tienen menos depresión, y cuando alguien está
deprimido, el ejercicio conduce a mejoras en la depresión", afirmó Trivedi.
No está claro de qué forma el ejercicio podría ayudar a curar la depresión, pero
Trivedi dijo que una posibilidad es que fomente la creación de nuevas neuronas y
conexiones en el cerebro.
45 minutos de ejercicio moderado de cuatro a cinco veces por semana pueden
plantear una gran diferencia, aseguró Trivedi.
Pero advirtió que para las personas deprimidas resulta difícil ayudarse a sí
mismas haciéndose más activas.
"Si se deprime, intente buscar todo el respaldo posible del ambiente para hacer
ejercicio, ya que le resultará más difícil hacer ejercicio que a su vecino que
no está deprimido", explicó.
Pero las personas deprimidas no deben intentar tratarse a sí mismas, añadió
Trivedi. "No importa qué tratamiento usen: medicamentos, psicoterapia,
ejercicio. Deben hacerlo bajo la guía de un proveedor de atención de la salud",
enfatizó.
El Dr. David Katz, director del Centro de Investigación en Prevención de la
Universidad de Yale, se mostró de acuerdo.
"Este estudio sugiere que la depresión reduce la inclinación a ser activo",
dijo.
"Debemos respetar ese hecho, tratarlo como una barrera que primero hay que
abordar directamente", agregó Katz.
Una vez los síntomas estén bajo control, planteó, "entonces fomente el ejercicio
como parte del tratamiento definitivo".

Artículo por HealthDay, traducido por Hispanicare
FUENTES: Madhukar Trivedi, M.D., professor, psychiatry, chair of mental health,
and director, Comprehensive Center for Depression, University of Texas
Southwestern Medical Center at Dallas; David Katz, M.D., M.P.H., Yale University
Prevention Research Center, New Haven, Conn.; Oct. 15, 2014, JAMA Psychiatry
HealthDay