Los niños de todo el mundo presentan una peor aptitud cardiaca

MARTES, 19 de noviembre de 2013 (HealthDay News) -- Los niños de todo el mundo
no pueden correr tan lejos ni tan rápido como sus padres a la misma edad, según
una investigación reciente.

En una carrera de una milla (1.6 KM), un niño de la actualidad terminaría un
minuto y medio después que un niño típico de 1975, comentó el autor líder del
estudio, Grant Tomkinson, profesor principal de la Facultad de Ciencias de la
Salud de la Universidad del Sur de Australia.
"Todos vivimos en un ambiente que es tóxico para el ejercicio, y nuestros niños
pagan el precio", lamentó Tomkinson.
Los niños de hoy día tienen una aptitud aeróbica que es alrededor de un 15 por
ciento más baja que la de sus padres en la niñez, descubrieron Tomkinson y sus
colaboradores. En EE. UU. es incluso peor: la resistencia cardiaca de los niños
se redujo en un promedio del 6 por ciento en cada una de las tres décadas entre
1970 y 2000.
Esos niveles de aptitud física en la niñez probablemente resulten en una peor
salud en la adultez, advirtió Tomkinson. Los niños tendrán unos corazones más
débiles y unos huesos más delgados, y una peor calidad general de vida.
Tomkinson presentó los hallazgos el martes en la reunión anual de la Asociación
Americana del Corazón (American Heart Association) en Dallas.
Sam Kass, director ejecutivo de la iniciativa Let's Move! de Michelle Obama,
dijo que los resultados sobre la carrera multigeneracional de una milla son
"chocantes".
"Está claro que en las últimas cuatro décadas hemos estado en un ciclo de
inactividad, y que esto conduce a algunos resultados de salud devastadores",
planteó Kass.
Los investigadores llegaron a sus estimados tras analizar 50 estudios sobre la
aptitud para correr que abarcaban desde la actualidad hasta 1964, y en los que
habían participado más de 25 millones de niños de 28 países entre los 9 y los 17
años de edad.
Los estudios incluidos en el análisis medían la resistencia cardiaca al observar
qué tan lejos podían los niños correr en un tiempo determinado, o cuánto
tardaban en correr una distancia determinada. Las pruebas por lo general duraban
entre 5 y 15 minutos, o cubrían entre media milla y dos millas (0.8 y 3.2 KM) de
recorrido.
La resistencia declinó significativamente con el paso de los años, pero de
formas que eran similares en los niños de ambos sexos y en los niños de menor o
de mayor edad en distintas partes del mundo.
Debido a que este estudio se presentó en una reunión médica, sus datos y
conclusiones deben ser considerados como preliminares hasta que se publiquen en
una revista revisada por profesionales.
Tomkinson dijo que hay muchos factores que se han combinado para crear una
sociedad cada vez más inactiva, que incluyen.
  Comunidades diseñadas para disuadir de caminar, montar bicicleta o jugar en el
  patio. "Tenemos que recorrer una mayor distancia para llegar a los parques y a
  los espacios verdes, y quizá no siempre tengan la mejor calidad", dijo. "Es
  menos probable que los niños vayan a la escuela en bicicleta o andando".
  Las escuelas que han descartado la educación física o que la han reemplazado
  con una versión menos agotadora de la clase. Actualmente, apenas el 4 por
  ciento de las escuelas primarias, el 8 por ciento de las escuelas intermedias
  y el 2 por ciento de las escuelas secundarias ofrecen una clase de educación
  física diaria, apuntó Kass.
  La prevalencia de las pantallas de televisión, computadora, tabletas y
  smartphones que drenan a los niños del deseo de salir al aire libre.
La obesidad también tiene parte de la culpa. "Actualmente somos más gordos, así
que desde una perspectiva de aguante del peso, mover nuestros cuerpos en el
espacio resulta más difícil", apuntó Tomkinson, y anotó que entre el 30 y el 60
por ciento de los declives en la resistencia al correr se pueden explicar
mediante los aumentos en la masa corporal de grasa.
Entonces, ¿cuál es la solución? Para Tomkinson, resulta sencillo: los niños
deben exponerse a un ejercicio prolongado que les deje agotados.
"El ejercicio debe ser divertido, pero también debe conllevar cierto esfuerzo",
planteó. "Tiene que cansarles un poco".
Los niños deben hacer al menos 60 minutos de actividad física que utilice los
músculos grandes del cuerpo, como correr, nadar o montar bicicleta, aconsejó
Tomkinson.
Sin embargo, no tiene que ser todo de una vez. Tomkinson apuntó que los niños
pueden tener periodos cortos de actividad física durante todo el día, por
ejemplo caminar 10 minutos en la mañana, o jugar de forma activa durante 10
minutos en el recreo.
Los padres también necesitan participar junto con sus hijos, añadió. Deben
limitar el tiempo sedentario de los niños a no más de dos horas al día, al mismo
tiempo que les exponen a una variedad de actividades físicas de las que podrían
disfrutar.
Kass, de Let's Move!, hizo un llamado a los estadounidenses para que se
esfuercen por hacer que la actividad física sea más fácil y divertida, tanto
para los niños como para los adultos.
"Sabemos que debemos romper este ciclo de transmitir la inactividad física de
una generación a la siguiente", enfatizó Kass. "No hay una única solución. Tiene
que suceder de forma integral. Debemos integrar la actividad física a nuestras
vidas. Tiene que formar parte de nuestras vidas diarias".

Artículo por HealthDay, traducido por Hispanicare
FUENTES: Grant Tomkinson, Ph.D., senior lecturer, School of Health Sciences,
University of South Australia; Sam Kass, executive director, Let's Move!
initiative; Nov. 19, 2013, presentation, American Heart Association annual
meeting, Dallas
HealthDay