La "remisión" de la diabetes de tipo 2 es una realidad, dicen las principales organizaciones

Miriam E. Tucker

8 de septiembre de 2021 Una nueva declaración por consenso realizada de manera conjunta por cuatro importantes organizaciones de diabetes tiene como objetivo estandarizar la terminología, definición y evaluación del fenómeno de la "remisión" de la diabetes.[1]

La declaración fue emitida conjuntamente por American Diabetes Association (ADA), Endocrine Society, European Association for the Study of Diabetes (EASD) y Diabetes UK.

El panel de redacción internacional de 12 miembros propone el uso del término "remisión" en contraposición a otros como "reversión", "resolución" o "cura", para describir el fenómeno de la normoglucemia prolongada sin el uso de fármacos hipoglucemiantes en una persona previamente diagnosticada con diabetes de tipo 2.

"La remisión de la diabetes podría estar ocurriendo con más frecuencia debido a los avances en el tratamiento", manifestó la Dra. Amy Rothberg, de University of Michigan, en Ann Arbor, Estados Unidos, miembro del grupo de redacción.

El grupo define la "remisión", ya sea obtenida mediante el estilo de vida, cirugía bariátrica u otros medios, como una hemoglobina glucosilada < 6,5% (< 48 mmol/mol) al menos 3 meses después de la interrupción de la farmacoterapia hipoglucemiante. El panel también sugiere monitorear a las personas que experimentan remisión de la diabetes y plantean preguntas que necesitan más atención y estudio.

El Dr. Matthew C. Riddle comentó a Medscape Noticias Médicas: "No es una cirugía, más bien, el propósito principal de la declaración era proporcionar definiciones, terminología, puntos de corte y recomendaciones de tiempos que permitan la recopilación de datos que eventualmente conducirán a pautas clínicas".

Una gran cantidad de investigación epidemiológica se lleva a cabo mediante el análisis de datos de registros médicos, anotó. "Si los médicos son más consistentes al ingresar datos en los registros y al realizar mediciones, será una mejor base de datos".

Realidad de la remisión: asesoría necesaria para retirar la prescripción y hablar con los pacientes
"Nuestros tratamientos están logrando cada vez más niveles de glucosa en el rango normal y en muchos casos, incluso después de suspender los fármacos. Eso no es una anomalía ni una ficción, es una realidad. Los médicos deben saber cómo hablar con sus pacientes al respecto", señaló el Dr. Riddle, del Departamento de Endocrinología, Diabetes y Nutrición Clínica de la Oregon Health & Science University, en Portland, Estados Unidos.
Se necesitan datos sobre los efectos de retirar la prescripción una vez que se alcanza la normoglucemia. "Realmente es muy útil tener evidencia epidemiológica e intervencionista sólida. Eso es lo que necesitamos aquí y eso es lo que el grupo realmente espera", añadió.

La declaración recomienda lo siguiente:

El término "remisión" debe usarse para describir una mejora metabólica sostenida en la diabetes de tipo 2 hasta niveles casi normales. El panel estuvo de acuerdo en que la palabra logra el mejor equilibrio, dado que la resistencia a la insulina y la disfunción de las células beta aún pueden estar presentes a pesar de la normoglucemia. "La diabetes no se cura. Las anomalías subyacentes siguen ahí. La remisión se define por la glucosa", agregó el Dr. Riddle. El panel también decidió eliminar los términos anteriores de American Diabetes Association como remisión "parcial", "completa" y "prolongada", porque son ambiguos e inútiles.

La remisión debe definirse como un retorno a una hemoglobina glucosilada < 6,5% (< 48 mmol/mol), el rango utilizado para diagnosticar la diabetes, de forma espontánea o después de una intervención y que persiste durante al menos 3 meses en ausencia de medicación habitual para disminuir la glucosa.

Cuando la hemoglobina glucosilada puede no ser confiable, como en las afecciones que involucran variaciones de hemoglobina o alteraciones en la sobrevida de los eritrocitos, las alternativas aceptables son una glucosa en sangre en ayunas < 126 mg/dl (< 7,0 mmol/l) o una hemoglobina glucosilada estimada < 6,5% calculada a partir del monitoreo continuo de glucosa.

La prueba de hemoglobina glucosilada para documentar una remisión debe realizarse justo antes de una intervención y al menos 3 meses después del inicio de la intervención y de retirar cualquier fármaco para reducir la glucosa.

Las pruebas de hemoglobina glucosilada subsiguientes deben realizarse al menos una vez al año a partir de entonces, junto con el monitoreo de rutina para las complicaciones relacionadas con la diabetes, que incluyen exámenes de retina, evaluación de la función renal, evaluaciones de los pies y pruebas de factores de riesgo cardiovascular. "En la actualidad no hay evidencia a largo plazo que indique que cualquiera de las evaluaciones generalmente recomendadas para las complicaciones pueda interrumpirse de manera segura", escribieron los autores.

Se necesitan investigaciones basadas en la terminología y las definiciones de la presente declaración para determinar la frecuencia, la duración y los efectos sobre los desenlaces médicos a corto y largo plazos de las remisiones de la diabetes de tipo 2 utilizando las intervenciones disponibles.

El Dr. Riddle comentó a Medscape Noticias Médicas: "Pensamos que la comunidad clínica necesitaba comprender en dónde se encuentra esta cuestión en este momento. La viabilidad de una remisión es mayor de lo que solía ser".

"Vamos a ver más pacientes que tienen lo que ahora podemos llamar remisión de acuerdo con una definición estandarizada. Es probable que en el futuro haya guías clínicas con respecto al tipo de pacientes y el tipo de estrategias apropiadas para buscar una remisión", destacó.