La diabetes en la mediana edad puede provocar problemas de memoria

MIÉRCOLES, 19 de marzo de 2014 (HealthDay News) -- Las personas que contraen
diabetes tipo 2 o hipertensión en la mediana edad parecen ser más propensas a
sufrir un daño cerebral que puede contribuir a la demencia a medida que
envejecen, halla un estudio reciente.

La diabetes podría en realidad encoger el cerebro en el transcurso de un periodo
largo, reduciendo el tamaño de áreas esenciales como el hipocampo, que tiene un
importante papel en la memoria a corto y a largo plazo, según el estudio.
Además, la diabetes y la hipertensión parecen aumentar el riesgo de una persona
de micro accidentes cerebrovasculares (ACV) y otros daños en los vasos
sanguíneos que alimentan al cerebro, señalaron los autores del estudio.
"Las personas que sufrieron de diabetes a una edad más temprana tenían [una
estructura] cerebral mucho peor que las que sufrieron de la enfermedad a una
edad mayor", apuntó la autora líder, la Dra. Rosebud Roberts, investigadora de
la Clínica Mayo. "Estos escáneres nos muestran que el daño cognitivo ocurre
durante un periodo muy largo. Mientras más temprano se contrae la diabetes tipo
2, más probable es que haya daño".
Hace mucho que la diabetes se ha vinculado con problemas del pensamiento y la
memoria más adelante en la vida, pero este estudio es el primero en proveer una
evidencia sólida que explica por qué ocurre, apuntó Keith Fargo, director de
programas científicos y alcance de la Asociación del Alzheimer (Alzheimer's
Association).
"Este estudio nos emociona mucho", dijo Fargo. "Hace tiempo que se sabe que hay
algún tipo de vínculo entre la diabetes y la capacidad cognitiva posterior en la
vida. Lo que aún no se sabía es por qué existe ese vínculo ni cómo se desarrolla
con el tiempo".
En el estudio participaron más de 1,400 personas con una edad promedio de 80
años, según el informe, que aparece en la edición en línea del 19 de marzo de la
revista Neurology. Los participantes del estudio tenían como máximo unos
problemas ligeros de la memoria y del pensamiento que se conocen como deterioro
cognitivo leve. Los investigadores evaluaron las habilidades de pensamiento y
memoria de los participantes, anotando cualquier señal de deterioro leve.
Entonces, los participantes del estudio se sometieron a una IRM cerebral para
buscar señales de daño cerebral, que pueden ser una indicación temprana de la
demencia.
Finalmente, los investigadores revisaron los expedientes médicos de los
participantes para ver si habían sido diagnosticados con diabetes o hipertensión
en la mediana edad, que para fines de este estudio se consideró de los 40 a los
64 años.
Los autores del estudio hallaron que las personas que contrajeron diabetes en la
mediana edad tenían unos cerebros que eran, en promedio, un 2.9 por ciento más
pequeños que los de los que no contrajeron diabetes. Y sus hipocampos eran
incluso más pequeños, un promedio de un 4 por ciento más pequeños que los de los
no diabéticos.
"Cuando el hipocampo comienza a reducirse, uno comienza a perder la memoria a
largo plazo y la capacidad de recordar eventos recientes", explicó Roberts,
quien también es miembro de la Academia Americana de Neurología (American
Academy of Neurology).
La diabetes en la mediana edad también se asoció con un riesgo un 85 por ciento
más alto de micro accidentes cerebrovasculares en el cerebro. Por último, las
personas con diabetes en la mediana edad tenían el doble de probabilidades de
sufrir de problemas del pensamiento o de la memoria, halló el estudio.
Y las personas con hipertensión en la mediana edad tenían el doble de
probabilidades de tener daño causado por un ACV en porciones del cerebro
asociadas con el pensamiento, la memoria y el lenguaje, apuntaron los
investigadores.
Aunque el estudio descubrió un vínculo aparente entre la diabetes o la
hipertensión en la mediana edad y los problemas de memoria más adelante en la
vida, no probó causalidad.
Los resultados de la investigación enfatizan la necesidad de que las personas
adopten un estilo de vida saludable en la mediana edad o antes, planteó Fargo.
Las encuestas recientes muestran que casi una cuarta parte de las personas creen
que solo están en riesgo de enfermedad de Alzheimer si existe en la familia,
comentó. En realidad, la demencia puede atacar a cualquiera que no se cuide
bien, añadió.
"Si usted tiene un cerebro, está en riesgo de demencia", señaló Fargo. "La
mediana edad realmente es un momento crítico para que las personas se enfoquen
en la salud del cerebro, y que no esperen a que sea demasiado tarde".
Las personas que deseen proteger el cerebro deben evitar contraer diabetes o
hipertensión, aconsejó Roberts. Anotó que incluso las personas que se hicieron
diabéticas a una edad avanzada de cualquier forma sufrieron daño cerebral como
resultado de la enfermedad.
Si una persona contrae una de estas dos afecciones crónicas, puede limitar el
impacto sobre el pensamiento y la memoria al controlar la enfermedad mediante la
dieta, el ejercicio y los medicamentos, señalaron los investigadores.
"Si tiene diabetes tipo 2, está en mayor riesgo de daño cerebral", advirtió
Roberts. "Pero si controla la diabetes bien, eso debería reducir el daño que se
está provocando en el cerebro".

Artículo por HealthDay, traducido por Hispanicare
FUENTES: Rosebud Roberts, M.B., Ch.B., M.S., the Mayo Clinic, Rochester, Minn.;
Keith Fargo, Ph.D., director of scientific programs and outreach, the
Alzheimer's Association; March 19, 2014, Neurology, online
HealthDay