La obesidad ocupa el segundo lugar después del tabaquismo como causa de muerte prematura

Liam Davenport
21 de julio de 2016 El sobrepeso y la obesidad se relacionan con un incremento significativo en el riesgo de muerte prematura, sobre todo en hombres, y los efectos se han observado en Europa, Norteamérica, Asia Oriental, Australia y Nueva Zelanda, confirma un metanálisis de datos de participantes individuales.

 

La recolección de datos de casi cuatro millones que participaron en 189 estudios, permitió a los investigadores descubrir que los individuos con un índice de masa corporal (IMC) de más de 25 kg/m2 tenían un incremento significativo en el riesgo de mortalidad por todas las causas, y aproximadamente una de cada seis muertes prematuras eran potencialmente evitables mediante la pérdida de peso.

El coautor, Sir Richard Peto, FRS, profesor de estadística médica y epidemiología en la Universidad de Oxford, Reino Unido, dijo en una conferencia de prensa: "La obesidad ocupa el segundo lugar después del tabaquismo como una causa de muerte prematura en Europa y en Norteamérica.

"El tabaquismo produce alrededor de una cuarta parte de todas las muertes prematuras en Europa y en Norteamérica y los fumadores pueden reducir a la mitad su riesgo de muerte prematura con suspenderlo. Sin embargo, la preobesidad y la obesidad ahora producen alrededor de una de cada siete de todas las muertes prematuras en Europa y una de cinco de todas las muertes prematuras en Norteamérica".

Además, el autor principal, el Dr. Emanuele Di Angelantonio, de la Universidad de Cambridge, en Reino Unido, dijo a Medscape Medical News que se espera que los hallazgos ayuden a "poner el punto final" en el debate en torno a la relación entre el IMC y la obesidad.

Dijo: "Desde luego, hay mucha investigación que debe realizarse para tratar de comprender otros factores implicados en la obesidad, sobre todo, por ejemplo, la distribución de la adiposidad y el tejido adiposo visceral, que no hemos podido estudiar en este artículo".

Sin embargo, añadió el Dr. Di Angelantonio, que este "posiblemente es uno de los estudios más extensos" del IMC y la mortalidad, "y espero que será un punto de partida para avanzar más allá del simple cálculo del IMC".

Los hallazgos actuales, que fueron publicados en versión electrónica de The Lancet el 13 de julio, contrastan con los de un estudio previo realizado por Flegal y cols., que señaló que el sobrepeso y la obesidad de grado 1 no se relacionaban con un aumento de la mortalidad y, de hecho, que el sobrepeso se relacionaba con una reducción significativa de la mortalidad por todas las causas (JAMA. 2013;309: 71-82).

El Dr. Di Angelantonio considera que los motivos de la diferencia en los hallazgos entre los dos no son simplemente que el análisis actual sea mucho más extenso por lo que respecta al número de estudios y pacientes incluidos, sino también porque él y sus colaboradores "adoptaron una metodología mucho más estricta".

Dijo que el "riesgo del mensaje" del artículo previo es que "tener sobrepeso u obesidad de grado 1 es normal". Resaltó: "En realidad, no lo es", añadiendo, "creo que aquí estamos reforzando este mensaje, y estamos reforzando la necesidad de contar con medidas de salud pública para tratar de implementar una estrategia que permita reducir el peso corporal".

La mortalidad aumenta linealmente con el IMC una vez que éste es superior a 25,0 kg/m2