Mayo Clinic

Feb. 28/2018 La hormona del crecimiento estimula el crecimiento durante la infancia y ayuda a mantener los tejidos y los órganos por toda la vida. La produce la glándula pituitaria, que tiene el tamaño de una arveja — y está localizada en la base del cerebro. Comenzando en la edad mediana, la glándula pituitaria lentamente reduce la cantidad de hormona del crecimiento que produce. 

 Esta disminución natural ha desencadenado un interés en usar hormona del crecimiento sintética para prevenir algunos de los cambios que se asocian con el envejecimiento, como reducción en los músculos y la masa ósea.

Si eres escéptico, tienes razón. Hay poca evidencia que sugiera que la hormona del crecimiento pueda ayudar a adultos que están generalmente sanos a recobrar la juventud y la vitalidad. De hecho, los expertos recomiendan no usar la hormona del crecimiento para tratar trastornos causados por el envejecimiento o relacionados con la edad.

Sí. Los médicos pueden recetar hormona del crecimiento sintética a aquellos adultos que tienen una verdadera deficiencia — no la disminución que puede esperarse a causa del envejecimiento.

La deficiencia de la hormona del crecimiento quizás sea causada por un tumor benigno en la glándula pituitaria (adenoma hipofisario). También puede ser causado por el tratamiento de un adenoma con cirugía o radioterapia.

Para los adultos que tienen deficiencia de la hormona del crecimiento, las inyecciones de esta hormona pueden: Aumentar la capacidad para el ejercicio, Aumentar la densidad de los huesos, Aumentar la masa muscular, Reducir la grasa corporal, La hormona del crecimiento también está aprobada para tratar a los adultos con la pérdida muscular relacionada con el SIDA o el VIH.

Los estudios de adultos sanos que tomen hormona del crecimiento son limitados. Aunque parece que la hormona del crecimiento puede aumentar la masa muscular y reducir la cantidad de grasa corporal en los adultos mayores sanos, el aumento de músculo no se convierte en aumento de fuerza. No está claro si la hormona del crecimiento puede proporcionarles otros beneficios a los adultos sanos.

La hormona del crecimiento puede causar una variedad de efectos secundarios para los adultos sanos, incluyendo: Síndrome del túnel carpiano, Aumento de resistencia a la insulina, Inflamación de los brazos y las piernas (edema), Dolor en las articulaciones y los músculos, En los hombres, aumento de tamaño del tejido en el pecho (ginecomastia)

La hormona del crecimiento también puede contribuir a trastornos como diabetes de tipo 2 y enfermedades cardíacas, y posiblemente un aumento en el riesgo para algunos tipos de cáncer.

Algunos estudios sugieren que puede ser más probable que los efectos secundarios de los tratamientos con hormona del crecimiento se presenten en los adultos mayores que en las personas más jóvenes. Como los estudios de los adultos sanos que toman hormona del crecimiento han sido a corto plazo, no está claro si los efectos secundarios eventualmente desaparecen o si empeoran.

Cuando la receta un médico, la hormona del crecimiento se da en forma de inyección bajo la piel. No hay pastillas de hormona del crecimiento disponibles con receta. Algunos sitios web venden la hormona del crecimiento en forma de pastilla, y sostienen que produce resultados similares a la forma del medicamento que se inyecta.

Pero no hay pruebas de que esto sea verdad. Estos suplementos de dieta algunas veces se conocen como liberadores de la hormona del crecimiento. Tampoco hay prueba de que los remedios homeopáticos que declaran contener hormona del crecimiento funcionen.

Si tienes preocupaciones específicas sobre el envejecimiento, pregúntale a tu doctor sobre maneras comprobadas para mejorar tu salud. Recuerda que las elecciones saludables en cuanto a estilo de vida — como comer una dieta saludable e incluir actividad física en tu rutina diaria — pueden ayudarte a sentirte muy bien al envejecer.