¿De dónde vienen los medicamentos contra el cáncer?

Dr. Rothfeld 
Si lo piensa, la respuesta es evidente.Quizá sepa que la aspirina procede de la corteza de sauce. O que la penicilina se obtiene del moho (concretamente del moho u hongo Penicillun notatum). ¿Y los fármacos contra el cáncer?

Unos científicos muy ingeniosos decidieron comparar los componentes activos de los medicamentos contra el cáncer con los de los alimentos naturales.

Como lector habitual de mis e-Tips de Salud seguro que no tengo que decirle lo que descubrieron: una sorprendente cantidad de estos fármacos tenían sus correspondientes soluciones naturales.

Estos investigadores hicieron en el ordenador un algoritmo con más de 7.900 moléculas de fruta y verdura y las compararon con 199 medicamentos autorizados contra el cáncer.

¿Y qué fue lo que descubrieron? Un impactante resultado de 110 frutas y verduras con potencial anticanceroso, con un funcionamiento parecido a los fármacos anticancerosos.

Una vez más, las multinacionales farmacéuticas monopolizan algo que se puede conseguir por unos céntimos... y le cobran (a usted, a su seguro o al sistema público de salud) un montón de dinero por ello.

Los mejores alimentos contra el cáncer
En primer lugar, los investigadores del estudio destacan que un estilo de vida saludable puede prevenir un impresionante porcentaje de entre el 30 y el 40 por ciento de todos los cánceres.

Y cuando analizaron los datos, descubrieron que los siguientes alimentos, procedentes directamente de la madre Tierra, coincidían con la mayoría de los fármacos contra el cáncer:

Naranjas dulces. Uvas. Zanahorias. Repollo. Apio. Cilantro. Eneldo. Té.

Además de reconocerlos el organismo, existe una diferencia sustancial entre los alimentos auténticos y los medicamentos.

Al consumir el alimento entero, se obtienen todos los nutrientes. Y dichos nutrientes actúan juntos -y normalmente mejor- que cuando están aislados.

Las naranjas dulces, el cilantro y el eneldo contienen un flavonoide llamado didimina que detiene la expansión del cáncer a otras partes del cuerpo (metástasis).

Cada una de estas frutas, verduras y hierbas son ricas en antioxidantes, que ayudan a eliminar el efecto desastroso de las células cancerígenas.

Y el té contiene catequinas, terpenoides y taninos, tres formas distintas de compuestos. Su acción complementaria logra que las células de cáncer se destruyan a sí mismas, y también alivia la inflamación.

En otras palabras, no hay ninguna manera de sustituir o imitar las ventajas de los alimentos naturales.

No deje que las multinacionales farmacéuticas le engañen.

Pregunte a su médico de medicina holística si puede utilizar alguno de estos alimentos (o tomarlos en forma de complementos) para sustituir los fármacos. ¡O simplemente para prevenir!